¿Alguna vez te has sentido menospreciado en el trabajo? No estás solo.
En el mundo laboral, enfrentamos dilemas y desafíos que prueban nuestro valor y determinación. ¿Qué sucede cuando ese desafío proviene de tu superior inmediato? Las palabras tienen poder, y pueden cambiar tu relación laboral.
A lo largo de este artículo, descubrirás frases poderosas y estrategias para enfrentar esta situación, basadas en experiencias reales y soluciones concretas.
1. Pedir retroalimentación
Cuando tratas con clientes, tienes que tener en cuenta su opinión para mejorar tu producto. Pues con un jefe pasa lo mismo.
Dile que opine sobre tu trabajo, que te diga que está bien y qué está mal.
Algo como: «Me gustaría conocer tu opinión sobre mi último trabajo. ¿Hay algo en las que podría mejorar o cosas que esté haciendo bien?»
Pedir retroalimentación es una forma de demostrar interés en mejorar y crecer en la empresa. A la vez, hace que empiece a haber una comunicación más transparente.
2. Valorar tu propio trabajo
Dedicas mucho tiempo a preparar una publicación para Instagram, la subes y no tiene ni un like. Eso pasa miles de veces, pero tú sabes que hiciste un buen trabajo y que ahí había valor.
Puedes decirte algo como: «Estoy orgulloso de los resultados que logré en el proyecto X. Creo que aporta valor al equipo y a la empresa.»
No esperes a que otros vean tu valía. Al reconocer tus propios logros, ganarás confianza y seguridad para comunicarte mejor ante cualquier persona.
3. Clarificar expectativas
Cuando empecé a vender online, mis metas estaban claras. ¿Las de tu jefe lo están?
Prueba a preguntarle algo del estilo: «Para asegurarme de estar en la misma página, ¿podrías decirme qué esperas que consiga con esta tarea?»
Conocer las expectativas de tu superior te permitirá alinear tus objetivos y evitar cualquier malentendido.
4. Buscar reconocimiento
Si haces algo y notas que no lo valoran, pídelo.
Di algo como: «He visto que mis esfuerzos en Y han provocado un aumento en Z. Me gustaría ver contigo cómo podemos destacar y aprovechar estos resultados.»
Es importante para tu desarrollo profesional sentir que tus logros son reconocidos. No tengas miedo de pedir ese reconocimiento.
5. Expresar tus sentimientos
Cuando hablo con amigos, siempre digo lo que siento.
No te guardes las cosas, explotarán. Dile algo así: «Me gustaría hablar contigo sobre como me siento. Noto que mi trabajo no está siendo valorado, y me gustaría entender por qué.»
El ser directo y honesto acerca de cómo te sientes puede abrir un canal de comunicación que antes estaba cerrado.
6. Definir tus límites
Si algo no te encaja, no tengas miedo a decir que NO.
Prueba con: «Entiendo que este proyecto es importante, pero trabajar el fin de semana no es sostenible para mí. ¿Podemos buscar una solución que nos vaya mejor a los dos?»
Poner límites claros te permite trabajar en un entorno que respete y valore tu integridad.
7. Ser proactivo
Las cosas no pasan por si solas, tienes que hacerlas pasar tú.
Intenta decir algo del estilo: «He visto algunas oportunidades en nuestra estrategia actual. Me gustaría proponer algunos cambios que creo que podrían beneficiarnos.»
No esperes que las oportunidades vengan a ti. Busca soluciones, propón proyectos, y sé el cambio que quieres ver.
Espero que alguna de estas estrategias y frases para jefes que no valoran a sus empleados te hayan dado alguna idea de cómo manejar un ambiente laboral donde te sientes menospreciado.
Si quieres seguir aprendiendo más sobre desarrollo personal y profesional, en mi lista de correo comparto consejos basados en mi experiencia personal para ayudarte a crecer a ti como profesional. Si te interesa, puedes dejar tu correo aquí abajo.